Alrededor de 820.000 muertes de niñes menores de cinco años podrían evitarse anualmente si las recomendaciones sobre la lactancia materna se respetaran, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF). Pero no solo eso, la lactancia materna también evitaría miles fallecimientos de madres.